El Diario Oficial de Galicia (DOG) publica hoy la orden de la Consellería de Emprego, Comercio e Emigración que en este 2024 impulsará la financiación de acciones formativas la demanda del tejido productivo gallego y dirigidas a personas trabajadoras ocupadas. Con un presupuesto de 4 millones de euros, se trata de la primera vez que se ponen en marcha esta iniciativa, a través de la cual la Xunta avanza en su compromiso firme con las microformaciones como una herramienta estratégica clave para atender las necesidades de las empresas, incrementar las oportunidades de las personas trabajadoras, ofrecer soluciones efectivas inmediatas para cubrir las vacantes laborales y facilitar las transiciones profesionales en los sectores con mayor impacto y futuro del mercado.

La convocatoria le da un nuevo ánimo a la apuesta por las experiencias cortas de aprendizaje, ya que además de incentivar la obtención de certificados profesionales (grado C), contempla también de manera decisiva las formaciones de corta duración (grado B, certificados de competencia) y mismo las microformaciones (grado A, acreditaciones parcial de competencia) con el objetivo de garantizar -sin rigidez y de manera ágil e inmediata- la adquisición de nuevos conocimientos requeridos por las empresas gallegas. Esto permitirá reforzar la capacitación de sus trabajadores fomentando su crecimiento profesional y cubrir los perfiles relacionados con las competencias y habilidades más demandadas por el tejido empresarial.

La flexibilización de la formación es un eje estructural del Gobierno autonómico gallego en su política de empleo, alineada con el sistema de microcredenciales por lo que aboga Europa, como un instrumento fundamental para fomentar más y mejor empleo de calidad, así como para dar respuesta a grandes retos como la adecuación de la oferta y de la demanda.

Así, gracias a esta convocatoria, una empresa podrá solicitar, según sus necesidades, una formación amplia de grado C -de hasta 1.000 horas- en un determinado ámbito, pudiendo fragmentar de manera más quirúrgica su demanda, optando solo por un módulo de entre 200 y 300 horas (grado B) o mismo por un bloque concreto incluido en ese mismo módulo, en torno a las 30 o 40 horas (grado A). Por ejemplo, una entidad del sector TIC podrá requerir para sus trabajadores -a través de las entidades y centros de formación acreditados- una formación específica sobre instalación y mantenimiento de sistemas domóticos (grado B) o acotarlo aun más a una microacreditación centrada exclusivamente en conectividad de un proyecto de estas características (grado A); o una compañía del sector naval, demandar un curso sobre documentación técnica para construcción y reparación naval o centrarse únicamente en el módulo de diseño 2D y 3D.