Seniority: qué es y cómo sacarle partido en las organizaciones

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Veamos qué es el seniority y cómo puede beneficiar a las organizaciones.

Hay un término anglosajón que se encuentra en auge en este momento en el entorno laboral, que la RAE define como «Superior en categoría y experiencia a quienes desempeñan la misma profesión o cargo». Hablamos del seniority. En otras palabras, hace referencia a aquellas personas que tienen mucha experiencia y se encuentran altamente cualificadas en su profesión. Se puede decir que cada organización tiene su propia idea de lo que es un seniority. Algunas empresas tienen unas escalas predeterminadas en función de diferentes características y otras, en cambio, prefieren evaluar cada caso en particular. No obstante, las características más comunes a la hora de determinar el nivel de seniority suelen ser los años de experiencia en un área o puesto, las habilidades técnicas y tareas que es capaz de llevar a cabo la persona, la autonomía y capacidad de autogestión, o la capacidad de gestión y liderazgo, entre otras.

¿Qué es el seniority?

Está claro que, dentro de la jerarquía organizacional, los años de experiencia de una persona marcan la diferencia en muchos aspectos y esta es la principal razón por la cual son tan buscados por las empresas. Un claro ejemplo es que un individuo que acaba de salir al mundo laboral requiere de supervisión, lo que implica una inversión de tiempo y dinero elevado. Un profesional con seniority tiene la capacidad de resolver más problemas en menos tiempo y no supone tal gasto para la organización.

En el artículo de hoy, hablaremos en profundidad sobre el seniority y sobre todo, nos centraremos en cómo pueden sacarle partido las organizaciones al hecho de tener a personas con esta habilidad dentro de su plantilla. Si no conocías el término, quédate para descubrir qué significa y sus ventajas para una empresa.

Se entienden por soft skills o habilidades blandas aquellas cualidades personales que se requieren para tener éxito en el trabajo. En esta categoría encaja perfectamente el seniority. Supone una madurez profesional que permite tener las competencias adecuadas para saber actuar bajo presión, dar soluciones de forma rápida y eficaz, ser un buen líder y saber influenciar a los demás, demostrar tener conocimiento sobre lo que hace y, en general, tener el criterio necesario para tomar decisiones y así aportar al desarrollo y crecimiento de la organización.

¿Cómo se adquiere?

Cómo se desarrolla el seniority es una pregunta frecuente. Según los expertos, tiene mucho que ver con la educación recibida en casa, los valores, actitudes, y pensamientos que se han adquirido desde la infancia y, por otro lado, las experiencias también juegan un papel importante. Todos los aciertos, errores y aprendizajes que la persona haya tenido durante su vida laboral suman de forma significativa para adquirir el nivel de seniority.

En el artículo de hoy, hablaremos en profundidad sobre el seniority y sobre todo, nos centraremos en cómo pueden sacarle partido las organizaciones al hecho de tener a personas con esta habilidad dentro de su plantilla. Si no conocías el término, quédate para descubrir qué significa y sus ventajas para una empresa.

Se entienden por soft skills o habilidades blandas aquellas cualidades personales que se requieren para tener éxito en el trabajo. En esta categoría encaja perfectamente el seniority. Supone una madurez profesional que permite tener las competencias adecuadas para saber actuar bajo presión, dar soluciones de forma rápida y eficaz, ser un buen líder y saber influenciar a los demás, demostrar tener conocimiento sobre lo que hace y, en general, tener el criterio necesario para tomar decisiones y así aportar al desarrollo y crecimiento de la organización.

¿Cuáles son los niveles?

Hay 4 niveles de seniority establecidos, que clasifican a los trabajadores en función de su experiencia:

  1. Trainee: Todas las personas que se encuentren estudiando o finalizando sus estudios y aún no cuentan con experiencia profesional. Es un nivel que al principio requiere de supervisión y seguimiento por parte de otro profesional de la empresa.
  2. Junior: Aquí entran todos los individuos con menos de 2 años de experiencia en la vida laboral.
  3. Semi-senior: Las personas que cuentan con entre 2 y 6 años de experiencia laboral encajan en este rango. Son autosuficientes y han conseguido un buen manejo de su trabajo.
  4. Senior: Más de 6 años de experiencia y, por lo tanto, es capaz de tomar decisiones rápidas y eficaces sin necesidad de supervisión o seguimiento.
Mitos sobre los senior en el ámbito laboral

Existen ciertas ideas preconcebidas que son erróneas y nos parece importante resaltar. A continuación, indicamos algunas de ellas:

  • Los senior no saben manejar las nuevas tecnologías. Muchas personas que llevan trabajando años en las organizaciones han aprendido a manejarse de forma adecuada con los aparatos electrónicos. Es más, son capaces de sacar provecho a las pantallas sin dejar de lado lo bueno que tienen los cuadernos y el bolígrafo a la vieja usanza.
  • Los senior están quemados y ya no lo dan todo por la empresa. Como todo el mundo, si el entorno es motivador, nos motivamos y queremos hacer nuestro trabajo de la mejor forma. Lo mismo ocurre con los senior. Si lo relacional, ambiental y económico es excitante, son igual de capaces de ilusionarse con el fin de conseguir un objetivo.
  • Los senior son más caros para la empresa. Como comentamos anteriormente, son personas con habilidades resolutivas mucho más eficaces y, por tanto, muchas veces es mucho más económico contar con un senior.
  • Los senior son todas personas mayores. Aunque es cierto que está muy ligado a la experiencia, ésta no lo es todo. De hecho, tener una personalidad madura, con un pensamiento crítico y resolutivo es una gran parte del seniority y por supuesto, no tiene nada que ver con la edad de la persona.
Cómo sacarles partido en las organizaciones

Contar con talento senior en la plantilla es altamente beneficioso para las organizaciones y analizaremos qué ventajas tienen y cómo las empresas pueden sacar el mayor provecho a este colectivo de personas.

En primer lugar, queda claro que la experiencia es uno de los puntos más fuertes para sacar partido a las personas senior. El amplio conocimiento de su trabajo y del mundo laboral hacen que sean más resolutivos, estén más informados y simplemente trabajen de forma más fluida y eficaz. Asimismo, la comunicación es imprescindible dentro de una empresa y los seniority son capaces de explicar sus ideas de forma clara y concisa para interactuar con los clientes o con sus superiores de forma adecuada.

Gracias a su experiencia, estos individuos tienen una gran habilidad para adaptarse a los cambios y a las nuevas circunstancias. Por ejemplo, los expertos afirman que en la pandemia por COVID-19 se pudo observar lo rápido y fácilmente que este colectivo se adaptó al teletrabajo y al nuevo ritmo laboral. Además, el talento senior asume de forma óptima el liderazgo de equipos, una cualidad muy demandada en las empresas. Poseen una gran capacidad para el trabajo en equipo y son capaces de analizar problemas y encontrar soluciones eficaces utilizando el pensamiento crítico.

El mundo laboral siempre busca el equilibrio perfecto entre talento y experiencia. Parece que sea la mezcla mágica que resuelve todos los conflictos. La diversidad intergeneracional es clave para combinar experiencias, fortalezas, debilidades y sensibilidades para sacar lo mejor de cada empleado y así, mejorar la calidad de vida dentro de la organización.

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Tomás Santa Cecilia

Director en CECOPS (Centro de Consultoría Psicológica en Madrid).